¿Por qué es importante la hemodiálisis en el Perú?
En el Perú, la enfermedad renal crónica (ERC) se ha convertido en un problema creciente de salud pública. Entre 2010 y 2017, la prevalencia ajustada aumentó de 0.5 a 1.5 por cada 1,000 habitantes, con incrementos destacados en regiones como Tumbes, Ucayali y Piura.
El Ministerio de Salud (MINSA), EsSalud y otras instituciones han expandido los servicios de hemodiálisis: en 2012 existían 16 centros, y en 2019 ya eran 74. Sin embargo, el número de nefrólogos por cada 1,000 pacientes con ERC disminuyó de 4.4 a 1.9 en ese mismo período, lo que refleja un desequilibrio entre la demanda creciente y la disponibilidad de especialistas.
Estudios locales también revelan que más del 80 % de pacientes en hemodiálisis en Lima presentan algún grado de enfermedad cardiovascular, siendo la disfunción diastólica la más frecuente (59 %). Esto evidencia que la atención al paciente en diálisis no debe limitarse al tratamiento renal, sino considerar un enfoque integral que incluya salud cardiovascular, nutrición y bienestar emocional.
La hemodiálisis en Perú, por tanto, no solo representa un tratamiento médico, sino un reto de infraestructura, recursos humanos y acceso equitativo, especialmente en zonas alejadas.
Referencias:
Gonzales, A., et al. (2015). Prevalencia de disfunción diastólica en pacientes en hemodiálisis crónica. Revista Peruana de Medicina Experimental y Salud Pública, 32(3), 471–477.
Herrera-Añazco, P., et al. (2019). Epidemiology of chronic kidney disease in Peru and the challenge for its prevention and treatment. Revista Peruana de Medicina Experimental y Salud Pública, 36(2), 302–310. doi:10.17843/rpmesp.2019.362.4023



